El Dr. Andrés Ibáñez Fue un gran luchador gestor del Movimiento Igualitario en Santa Cruz de la sierra. Su visión nunca fue regionalista ni separatista. Una persona que veía la igualdad como la raíz de toda Ideología, un Federalista Humanitario, Ha sido un personaje del cual muy poco se ha escrito.
En estos últimos años se ha tergiversando la historia a conveniencia de ciertos sectores políticos, ajenos a su lucha, entre ellos los sectores mas conservadores de la sociedad cruceña, como el comité cívico y alguno que otro partido fracasado.
Pero el motivo, no es hacer mención a una(s) persona(s) que ahora se agarran del federalismo y/o de la lucha de Ibáñez, si no el de mostrar la historia que muchos no desean leer o que se lea…
El 1ero de octubre de 1876, Andrés Ibáñez encabezó la revolución armada que lo proclamo gobernador de nuestro departamento, con el apoyo de una elección popular.
“¡Somos Iguales Carajo!”. Gritábamos Con fuerza…
Si fue pa’l carnaval, no se si el segundo o tercer día, bueno como usté sabe , yo siempre he estado al lado de los artesanos.
La cosa es que estábamos en campaña y fue ahí, a la vuelta de 1a plaza que nos encontramos con el grupo de Antonio Vaca Diez, que también andaba en campaña:
...Yo, la verdad, no me acuerdo como empezó el lío, pero lo cierto es que el tipo se metió con mi madre. Vaca Diez empezó a hablar no se que huevadas y la gente que estaba conmigo se enojó... No pues, me defendieron!
-¿Que pasó luego?
Seguimos caminando hasta la plaza y ellos atrasito, provocando: -que los cunumis, el cambero, la vergüenza social...- Ahí si que me enojé y nos paramos frente a frente. Los mire a toditos con sus peinados, sombreros de copa, camisas con cuello almidonado, botincitos de charol... Miré a los que estaban conmigo..¿y que vi? Cambas con abarcas, descalzos, sin camisa algunos y otros con su dril todo remendado, pantalones arrollados... Ahí nomás pelé capucha y me saque la levita, boté la cachucha y me arrollé los pantalones. Sabe quien hizo lo mismo al ratingo? Melquíades Barberi, el mismísimo doctor! Yo no sé en qué rato los que estaban conmigo y algunos mirones, empezaron a gritar "Somos iguales carajo!"
-¿No tiene miedo a que lo ajusticien?
-Alo que tengo miedo, es a que me ajusticie el de arriba por no saber responder a las cosas injustas y mientras yo viva no va haber quien me pare, mire Andrés Ibáñez, el doctor sin levita se lo juera en 1874.
- Lo han llamado vergüenza social …
- Y cambero y no le digo que hasta se han metido con mi madre, no importa, sabe, uno no nace con privilegios para darle la espalda a quienes no lo tienen, todo lo contrario, si uno tiene es por algo, no es por nada, es por algo siempre en mi caso es por justicia; de esto estoy seguro.
Recordaba esa entrevista por los montes, picado de mosquitos, ejenes y toda suerte de alimañas.
- Quien diría huyendo de mi propia tierra, por quererla y amarla demasiado, qué vida -¿no Dr. Melquiades? Nosotros los doctores de nuestro pueblo proscritos por el resto de doctores que no aguanto saber que era posible la igualdad en nuestra tierra.
- Pero no se puede ¿no? Siendo tan poquingos, oiga como si no fuera fácil lograr que las cosas se hagan bien, Don Andrés Ibáñez – dijo Eustaquio-.
- Lo importante es que los vecinos, que logramos, que luchamos, que quisimos, que pudimos, que demostramos que se puede nomás y no es como dicen que el pueblo se cansa, que los pueblos ven que sus lideres son grandes y no le mienten, el pueblo responde….
El gobierno dictatorial de Hilarión Daza envía 600 efectivos para “Aplacar la rebelión” en el oriente boliviano.
General: ¿Cuál es la evaluación de la situación actual?
Tranquila. El ejercito le puede garantizar a la población que todo esta en orden.
-¿Fue difícil la captura de Ibáñez?
Si y no . Sí, en el sentido que tuvimos que seguir sus huellas a través de la chiquitania y no, porque en todo momento teníamos la situación controlada.
-¿Cómo fue la captura?
Lo sorprendimos en su hamaca.
-¿En algún momento pidió clemencia?
Sí, pero yo tenia que hacer cumplir la ley.
Las damas cívicas Cruceñas le ha entregado una medalla de oro, era premio a su labor de pacificador del oriente….
Sí. Me siento halagado y quiero Expresar Públicamente mi agradecimiento a las bella damas aunque en realidad yo solo cumplía con mi deber …
Cita:Fuentes:
Carlos Montenegro: Ibáñez era el caudillo de "las clases trabajadoras cruceñas", "un auténtico precursor de la revolución social en América del Sur". El presidente Daza ordeno su muerte "a mérito de que divulgaba teorías socialistas"
-Periodico VOCES direcion José A. Parraga Santa Cruz Bolivia
-Mirando lejos, Ensayo historico Ensayo Historico de Santa Cruz de la Sierra
-Investigaciones Historicas Sobre el Oriente Boliviano(Facultad de Comunicacion Social y humanidades -UPSA) pags 141-143
-http://www.bolpress.com/art.php?Cod=2005003684
4 comentarios:
que interesante información, estoy segura q la mayoría de la población desconoce estos hechos. Me llama demasiado la atención el hecho de q el rol q jugó el comité civico femenino es el mismo q sigue adoptando en nuestros días.
Santa Cruz somos todos: estoy de acuerdo, creo que les sirvió muy bien el regirse bajo sus políticas conservadoras, ya q hasta ahora siguen protestando ante las personas que quieren igualdad y justicia social , muchas gracias por tu comentario, un saludo cordial y bienvenida/o
jaja y luego el autor de este blog se queja de imparcialidad, su blog es todo, menos imparcial
Nunca dije que yo Era imparcial, de hecho tengo una posición política que por cierto es incomoda sobre todo aquí en Santa cruz, a diferencia de otros que se vanaglorian y engañan a los incautos abduciendo Imparcialidad, es mas creo que creerse imparcial (ahorabolivia 2.0) es un acto de hipocresía.
Por eso Critico a todos los cívicos que juran que no son políticos, pero sin embargo son totalmente funcionales a intereses sectarios.
de hecho sostengo q no existe medio, persona que sea imparcial, y repito: Vanagloriarse con la imparcialidad es solo para engañar a incautos.
Saludos y bienvenid@ a este blog en donde damos una opinión alternativa y al margen de los medios de “incomunicación”.
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